Diverso, radical, extraordinario. Conociendo y entendiendo un viñedo salvaje, abrazando la diversidad de este complejo viñedo, nacen dos vinos únicos.

Alto Los Cuises es diversa, radical, imponente, una finca imposible con un enorme destino nacido de una visión que no podíamos dejar pasar. Enclavada entre laderas y montañas, optamos por no domarla; en cambio, hemos tardado años en entenderla. Descubrimos que su microclima único hace posible que una higuera, una palmera y vides crezcan juntas en la ladera de una montaña. Descubrir terrazas y morteros tallados en los cantos rodados nos acerca a nuestra cultura indígena y nuestro legado.